La prueba pericial

La prueba pericial o dictamen de peritos, como se ha visto en artículos anteriores, es un medio de prueba en virtud del cual una persona especializada y con los conocimientos técnicos adecuados aporta su valoración en un proceso para que el juez pueda valorar mejor la naturaleza de los elementos de prueba. Es importante recalcar que dicha prueba debe referirse a conceptos, juicios y máximas de experiencia propias de un saber especializado. Por tanto, la función del perito es aportar al órgano jurisdiccional los conocimientos que por su profesión, pericia o experiencia, posea, a fin de que este pueda resolver o apreciar mejor los hechos relevantes en el pleito.

La prueba pericial tiene una gran relevancia en todos los procesos. En numerosas ocasiones, la decisión sobre la validez o nulidad de un acto o disposición de carácter general depende de la apreciación por el órgano jurisdiccional de determinados aspectos técnicos, que han de ser acreditados por un dictamen de peritos.

Veamos a continuación la importancia de esta figura en el marco administrativo.

Importancia y funciones del Perito Administrativo

Los informes técnicos y las pruebas periciales juegan un papel fundamental en la actividad administrativa y judicial de determinados procedimientos administrativos y judiciales. Su figura cobra especial relevancia cuando se trata de cuestiones especializadas, ya que la calidad y rigurosidad del informe, tanto técnica como legal, puede influir en la decisión del juez respecto del procedimiento. La labor principal que desempeña el perito administrativo es el análisis y la valoración de la litigiosidad que puede originarse con motivo de la contratación administrativa, así como de otros aspectos relacionados con cualquier procedimiento administrativo.

Procesos en los que participa el Perito Administrativo

Los peritos administrativos pueden intervenir en todos aquellos procedimientos en vía administrativa en los que surja cualquier controversia para cuya resolución se requiera el dictamen de un técnico titulado en el área en cuestión. Dentro de los procesos judiciales en los que se recurre a la prueba pericial en la jurisdicción contencioso-administrativa, podemos afirmar que los procesos relacionados con materias de urbanismo se encuentran entre los más frecuentes. En estos casos, el perito desempeña un rol fundamental, como puede ser el análisis y la determinación del justiprecio de una expropiación o la ejecución de expedientes de ruina. También es habitual su participación en procesos relacionados con la concesión o denegación de licencias urbanísticas.

Otro de los ámbitos en los que es clave la figura del perito es la interpretación de la contratación administrativa y las controversias que pueden surgir entre las partes intervinientes. En estos casos, el objeto de disputa suele estar relacionado con aspectos relativos a determinados procedimientos contractuales y pueden versar sobre hechos fortuitos, causas de fuerza mayor o, la más habitual, valoración de daños. Asimismo, podría requerirse un informe pericial en procesos de responsabilidad patrimonial de la Administración Pública, con el objetivo de que esta se haga responsable de los daños causados por el funcionamiento de sus servicios.

Los informes periciales deben cumplir una serie de características, como que han de elaborase por escrito y contener una relación del análisis llevado a cabo, identificando todos los intervinientes en la causa. Además, deberá recoger las conclusiones a las que se ha llegado a través del análisis e incluso proponer sugerencias respecto de las medidas que sería oportuno adoptar. El informe pericial debe estar redactado con un lenguaje claro y comprensible para las personas no expertas en la materia, debiéndose adjuntar al mismo todos los documentos necesarios para su mejor comprensión.

La prueba es un elemento esencial a la hora de conseguir que la resolución administrativa o sentencia que dicte el tribunal en cuestión sea favorable a nuestros intereses, por lo que el dictamen pericial puede ser una figura clave en el procedimiento. El perito debe ser un técnico cualificado, cuya obligación es actuar con objetividad basando su análisis en la experiencia y el conocimiento científico.

Como se ha podido ver, la elección del perito administrativo es una decisión que debe dejarse en manos de los mejores profesionales, pues de ella puede depender el éxito o el fracaso en el procedimiento. En Perito Judicial Oficial contamos con profesionales dotados con las aptitudes y el rigor necesarios para resolver valoraciones complejas y realizar los informes oportunos con la máxima diligencia, técnica y legal. Además, contamos con una amplia experiencia en el sector y una red de colaboradores y expertos en toda la geografía española.

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